El Procurador de los Derechos Humanos, Jorge de León, admitió hoy que deja el cargo preocupado por las constantes violaciones, la pobreza y la miseria en la que viven los guatemaltecos.
“Duele la violencia de todos los días, tanta pobreza, tanta miseria y la falta de capacidad del Estado para dar respuesta a estas demandas”, manifestó el magistrado de conciencia en una rueda de prensa en la que dio cuenta de sus logros en los cinco años en el cargo y los retos que le quedan a Jordán Rodas, que le sustituirá el próximo domingo.
La pobreza afecta a más de la mitad de los 16 millones de habitantes que tiene Guatemala, que también es considerada como uno de los países más violentos de América Latina con una media de 15 asesinatos por día.
Cuando llegó al cargo había una administración desordenada
De León recordó que cuando llegó como procurador el 20 de agosto de 2012 encontró una institución desordenada administrativa y financieramente y ahora le entregará a Rodas una Procuraduría “sólida, independiente, ordenada y con solvencia”.
Aseguró que se va con un sinsabor por los índices de criminalidad, por la situación “perversa” en el sistema carcelario que calificó como “uno de los peores del mundo”.
Cárceles sin control
En su opinión, en las cárceles, donde están detenidos más de 20 mil personas, la mitad de ellos preventivamente, “no tienen el control las autoridades”.
“Los asesinatos y las extorsiones están a la orden del día”, sostuvo De León, al recordar también que uno de los momentos “más difíciles” en su gestión fue la muerte de más de 40 niñas y adolescentes en el Hogar Seguro Virgen de la Asunción el pasado 8 de marzo.
Resaltó que ese hecho “fue devastador” para él porque “llevábamos un año de estar denunciando las malas condiciones en la que se encontraban las adolescentes”.
Denunció falta de medicamentos
El Procurador dijo que la mayoría de sus acciones estuvieron enfocadas también a denunciar la falta de medicamentos en los hospitales y la desatención en la que se encuentra la población.
Justicia tardía
Respecto al sistema judicial, De León manifestó que la aplicación de la justicia “sigue siendo tardía”, aunque expresó que el hecho de que algunos que eran “intocables”, cuyos nombres de reveló, estén en prisión, “ya es un avance”.
El magistrado de conciencia instó a la población a seguir luchando por la justicia y también contra los actos de corrupción en Guatemala.
PDH logró confianza, dice De León
Dijo que durante los cinco años al frente de la institución trabajó en la “desconstrucción” del estigma de que la Procuraduría actuaba en defensa de la delincuencia, y logró un nivel de confianza en la ciudadanía cuando se le exigía su presencia por encima del resto de la institucionalidad nacional, afirmó.
