Los momentos clave durante el discurso del Presidente Jimmy Morales, que presentó su segundo informe de Gobierno, fuero evidenciados cuando los asistentes a la ceremonia en el pleno del Congreso de la República ovacionaron sus palabras.
Al inicio el mandatario recibió aplausos al rechazar “las presiones mediáticas o fácticas” y casi al finalizar por su decisión sobre el traslado de la Embajada a Jerusalén.
“El mundo entero está harto de lo políticamente correcto, simplemente hay que hacer, lo que se debe hacer”…“presiones mediáticas o fácticas”
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“Ni quiero pelear, ni debo pelear, ni he peleado, ni pelearé con ningún organismo nacional”
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La ovación más extensa de todas, fue por la directriz del traslado de la Embajada a Jerusalén, dato que el mandatario resaltó como un avance en política exterior.
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Pensamiento de Churchil y Pilatos
El mandatario, que empezó su discurso recordando una frase adaptada de Winston Churchil: “Los políticos piensan para las próximas elecciones y los estadistas para las próximas generaciones”. También recordó cuando Poncio Pilatos se presentó ante la multitud que crucificaría “a un inocente”, “nadie puede lavarse las manos. Simplemente se debe hacer lo que se debe hacer”, afirmó.
El segundo informe de gobierno