Costa Rica envió este martes "su más enérgica y rotunda protesta" al gobierno de Nicaragua por la incursión de militares de ese país en su territorio, donde mataron a un hombre que perseguían.
El gobierno central nicaragüense dijo desde Managua que la acusación es "falsa" e "infundada".
La cancillería costarricense exigió explicaciones a Nicaragua por los hechos ocurridos el lunes en la localidad fronteriza de Pocosol, en una nota entregada por la viceministra de Relaciones Exteriores, Lorena Aguilar, al embajador nicaragüense en San José, Duilio Hernández.
La nota indica que una investigación de la policía judicial verificó que seis militares nicaragüenses ingresaron 150 metros en territorio costarricense, en la localidad de Pocosol donde mataron a un hombre identificado como Rubén Loáisiga, de nacionalidad nicaragüense.
"Además del asesinato que se cometió en suelo costarricense por parte de oficiales de Nicaragua, el ingreso de militares nicaragüenses al territorio costarricense constituye una grave violación a la integridad territorial y soberanía nacional", añade la nota, que indica que los uniformados regresaron de inmediato a su país.
Nicaragua responde
Pero Nicaragua endilgó a Costa Rica hacer "acusaciones falsas" sobre la muerte de un "delincuente común" en una zona fronteriza.
En una nota a San José, la cancillería nicaragüense "rechaza las infundadas aseveraciones de las autoridades de Costa Rica, que (...) pretende manipular la ocurrencia de un delito común con acusaciones falsas".
Según la policía nicaragüense, Rubén Loáisiga tenía antecedentes de robo de ganado (abigeato) y habría cometido un robo con fuerza en un poblado fronterizo, lo que obligó la intervención de la fuerza.
Asimismo, Managua afirma que Costa Rica busca "encubrir el asesinato perpetrado" por la fuerza pública de ese país contra un ciudadano nicaragüense el pasado 12 de agosto en una zona fronteriza.
Rencillas con Costa Rica
El cruce de las notas diplomáticas agrava el distanciamiento entre los dos países, cuyas relaciones se tensaron desde 2010 cuando tropas nicaragüenses tomaron el territorio fronterizo de Isla Portillo.
El caso motivó una querella ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya, que determinó la soberanía costarricense sobre el territorio ocupado.
Asimismo, San José apoya al movimiento opositor contra el gobierno del presidente nicaragüense Daniel Ortega, que estalló en abril de 2018 con una ola de protestas, cuya represión dejó al menos 325 muertos.
Organismos internacionales afirman que 62,500 nicaragüenses salieron al exilio desde el inicio de las protestas, y la mayor parte de los ellos se instalaron en Costa Rica.
*Con información de AFP
