La Organización Mundial de la Salud (OMS) manifestó este jueves su preocupación por el plan o decisión de algunos países europeos de “recortar” el tiempo de cuarentena para posibles casos de coronavirus (Covid-19).
La agencia de la ONU reiteró que sigue recomendando un aislamiento de 14 días para todas aquellas personas que hayan estado en contacto con casos positivos de la enfermedad.
Asimismo, la OMS hizo énfasis en el “alarmante” ritmo de transmisión del Covid-19 en Europa, continente que se enfrenta a un resurgimiento de la pandemia, con cifras superiores a las registradas en marzo y abril.
“Las cifras de septiembre deberían servir de alarma para todos nosotros”, dijo Hans Kluge, director de la OMS para la región, en declaraciones desde Copenhague.
En Francia, donde se realizan test de diagnóstico masivos, se registraron 10 mil nuevos contagios en las últimas 24 horas.
En España, la región de Madrid es el epicentro del rebrote, y las autoridades han llamado a “hacer lo que haga falta para controlar la situación”.
En todo el mundo, la pandemia ha dejado más de 941 mil muertos y casi 30 millones de contagios, según un nuevo balance establecido este jueves por la AFP, basado en fuentes oficiales.
Plan para proteger al personal sanitario
Este jueves, la OMS también lanzó un plan para ayudar a proteger al personal sanitario, en primera línea de batalla contra el Covid-19.
“El Covid-19 ha expuesto al personal sanitario y a sus familias a un nivel de riesgo sin precedentes”, indicó la OMS, subrayando que las estadísticas muestran claramente que “las tasas de infección entre estos últimos son mucho más altas que entre el resto de la población”.
Los riesgos no son solo físicos, ya sea debido al coronavirus o a la violencia a la que está expuesto dicho personal.
El estrés, creado por el miedo permanente a enfermarse, las largas horas de trabajo, la separación de los familiares para protegerlos y, a veces, el rechazo o la hostilidad de la sociedad, también socavan gravemente su salud.
El plan, de cinco puntos, aconseja establecer sinergias entre las estrategias destinadas a garantizar la seguridad de los enfermos y de los profesionales de la salud, o desarrollar programas nacionales para proteger mejor al personal sanitario.
*Con información de AFP