Autoridades de Costa Rica deportaron esta semana a ocho salvadoreños, a los que se acusa de ser pandilleros y de integrar las bandas que siembran el terror en su país,
La Dirección de Migración de Costa Rica informó este miércoles, por medio de un comunicado, que los ocho salvadoreños, señalados de tener un “alto perfil delictivo”, estaban detenidos desde agosto en un centro de reclusión para migrantes, acusados de delitos como extorsión, robo, narcotráfico, falsificación de cheques y portación ilegal de armas.
Los extraditados fueron identificados con los apellidos Villega López, Rivera Espinoza, Santos Rodríguez, Hernández Rivera, Valencia Barahona, Miranda Ramos, Moran Sánchez y González Salmerón, algunos de los cuales tenían órdenes de arresto de la Interpol.
“Los salvadoreños, fueron puestos a las órdenes de las autoridades de su país para los procesos correspondientes” tras la extradición, señaló el comunicado de la Dirección de Migración.
Casi 600 deportados en 2020
En 2020, Costa Rica deportó a 580 personas, de las cuales a 34 estaban señaladas de tener vínculos con las pandillas centroamericanas.
Las pandillas son responsables de gran parte de la violencia criminal en el territorio centroamericano, especialmente en el denominado Triángulo Norte, el cual integran El Salvador, Guatemala y Honduras.
Esta zona es considerada una de las regiones sin guerra más violentas en todo el mundo.
*Con información de AFP