Madonna volvió a ser protagonista en Instagram con la publicación de diez fotos en las que se la ve en poses provocadoras sobre una cama.
La cantante apareció luciendo lencería negra, medias de red y unos stilettos Louboutin, con su característica suela roja.
Como era de esperarse, las imágenes causaron conmoción entre sus fanáticos, pues en menos de dos horas ya habían superado los 500 mil likes.“Un Ángel cuidándome”, escribió en su publicación haciendo referencia al la imagen que está sobre la cama donde quiso exponer la figura que mantiene y no se limitó en mostrar su cuerpo.
Además, los seguidores no perdieron la oportunidad de escribirle halagadores mensajes, pues a sus 63 años se destapó como nunca.
Otros decidieron criticar el rostro de la Reina del Pop, pues las aseguran que el exceso de cirugías han acabado con su belleza ya que luce irreconocible.
- “El pobre ángel necesita trabajar turnos extra para ti 😂😘”
- “¿Qué está pasando contigo, no te reconozco”
- “Mil formas de morir parte uno”
- “Creo que Photoshop no es gratis…”
- “Por favor deja de hacerte photoshopear tanto que no lo necesitas”
Polémica de la cantante
Hace unas semanas, Madonna había dado de qué hablar por una controversial producción para la portada del número de invierno de V Magazine.
Décadas después de su recordado homenaje a Marilyn Moroe en el videoclip de “Material Girl”, posó casi desnuda para emular la última sesión de fotos que la actriz hizo antes de su prematura muerte en 1962 a los 36 años.
La estrella fue fotografiada tumbada en una cama con unas medias de red, guantes blancos, un collar de diamantes en forma de cruz y con el pelo rizado con el estilo característico de Marilyn. Y en otra imagen se exhiben frascos de píldoras recetadas apiladas junto a la misma cama.
El fotógrafo Steven Klein explicó la visión detrás de esta producción, que fue muy cuestionada en las redes sociales por la creencia de que recrea el lecho de muerte de Monroe, quien fue encontrada sin vida en su casa de Brentwood por una aparente sobredosis de pastillas para dormir.
“Este ensayo fotográfico se inspiró en una sesión que Marilyn Monroe realizó con el fotógrafo Bert Stern titulada The Last Sitting”, aclaró Klein a la revista.
“Hicieron la sesión en el hotel Bel Air en 1962, antes de que ella falleciera. Lo que se suponía que iba a ser una sesión de tres horas, se convirtió en un torbellino de tres días, trabajando día y noche. Bebiendo, riendo, haciendo fotos, editando, durmiendo y luego haciendo más fotos: un asunto privado entre dos artistas que ya no suele ocurrir”, añadió.