La Policía Nacional Civil (PNC) reveló nuevos detalles sobre el caso de los payasos que fueron localizados sin vida en el asentamiento Luz de Cristo, Villa Lobos II, zona 12 de Villa Nueva. De acuerdo con el informe policial, Nelson Steven Villatoro Escobar, mejor conocido como “Charquito”, tenía antecedentes criminales y se está determinando si mantenía vínculos con una pandilla, al igual que su pareja Joselin Chacón Lobo, conocida artísticamente como la payasita “Chispita”.
Jorge Aguilar, portavoz de la PNC, detalló que Villatoro Escobar fue capturado en flagrancia por posesión de droga. El hecho ocurrió el 28 de febrero de 2018 en Sacatepéquez. El funcionario reveló que en ese año se le detuvo cuando se desarticuló una clica del Barrio 18.
“En un allanamiento efectuado en el sector 1, casa 5, Jardines de San Gabriel, municipio de San Juan Sacatepéquez, fueron capturados Melvin Alfredo Urízar Vásquez, de 22 años; Jonathan Geovany Urízar, de 28, y Nelson Steven Villatoro Escobar, de 18, mientras que una adolescente de 15 años fue puesta a disposición del juzgado respectivo, por haberles encontrado tres bolsas pequeñas con marihuana, nueve teléfonos celulares y Q315 en billetes de diferentes denominaciones”, dice el informe policial con la fecha antes mencionada.
Chats de WhatsApp y vínculos con las pandillas
Aguilar confirmó que se lleva a cabo una investigación acerca si “Charquito” y su pareja Joselin Chacón Lobo “Chispita” eran personas activas en el Barrio 18 o si les hacían favores, esto tras la filtración de unas capturas de pantallas de unos chats de WhatsApp.
En los mensajes de WhatsApp, que están en posesión de las autoridades, la pareja de payasos se dedicaba a recolectar dinero producto de extorsiones del Barrio 18. Sin embargo, en una ocasión se habrían quedado con el efectivo de la clica. Esto habría originado el crimen contra la pareja.
La pareja fue localizada sin vida el 30 de junio pasado enterrados en el asentamiento Luz de Cristo, Villa Lobos II, zona 12 de Villa Nueva, tras más de 50 días desaparecidos. Según un informe del Instituto Nacional de Ciencias Forenses, fallecieron por asfixia por estrangulamiento. Sus cuerpos estaban enterrados en una fosa a unos seis metros de profundidad.
La pareja desapareció el 9 de mayo después de supuestamente haber montado un show en un centro carcelario de Escuintla. Sin embargo, según registros penitenciarios, en esa ocasión solo habría ingresado la payasita “Chispita”. Luego se habrían trasladado a la Central de Mayoreo (Cenma) para otro evento en donde se perdió el rastro.
