Sofía Vergara, aclamada por su papel de Gloria Pritchett en Modern Family, expresó su incomodidad al filmar escenas íntimas para la serie Griselda. La actriz de 51 años admitió que la experiencia fue difícil debido a sus preocupaciones sobre su apariencia.
“Quiero decir, cuando tenía 30, quizá no me habría incomodado. (Pero esta vez) creo que me preocupaba tener un aspecto horrible”, confesó.
En la miniserie, Vergara interpreta a Griselda Blanco, una figura infame en la historia del narcotráfico, conocida como “La madrina de la cocaína”. La producción sigue la vida y muerte de esta mujer que lideró uno de los cárteles de la droga más rentables de la historia.
A pesar de tener una carrera de más de 20 años trayectoria, Griselda fue el primer proyecto televisivo que requirió algunas tomas del cuerpo semidesnudo de la actriz. “No creo haber hecho nunca una escena de sexo”, resaltó. Y agregó que tuvo dificultades para concentrarse durante la filmación.
“Pensaba: ‘¿Desde dónde me están grabando? ¿La celulitis? ¿Desde un lado?’. Supongo que soy vanidosa. Creo que eso me mantuvo despierta”, agregó. A pesar de sus preocupaciones, Vergara admitió que las escenas finalmente “salieron bien”.
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Atribuyó gran parte de esta comodidad al director de la serie, Andy Baiz. “La escena está muy oscura y Andy es muy artístico”, destacó. Además, agregó: “Me hizo sentir muy bien y me dijo: ‘(La cámara) nunca va a permanecer mucho tiempo contigo’”.
Baiz, de 49 años, previamente había comentado sobre la “transformación física” que la actriz tuvo que atravesar para encarnar a Blanco.
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Él describió este proceso como “uno de los aspectos más difíciles de todo el espectáculo”. Vergara misma subrayó la importancia de lograr el look correcto de la época. “Fue en Miami en los años 70 y 80. Para mí era muy importante desaparecer. Conseguir el aspecto correcto”, puntualizaron.
