El titular de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), Marco Livio Díaz, se refirió este viernes 16 de agosto a los resultados de una investigación que se revelaron durante la presente semana, relacionados con la posible existencia de una organización criminal que habría defraudado al Estado por al menos Q300 millones.
Durante una entrevista en el programa A Primera Hora, de Emisoras Unidas, el funcionario explicó de qué se tratan los hallazgos, cómo se dieron las primeras alertas y el seguimiento que se da a las anomalías encontradas. También habló del impacto de este caso en las arcas públicas y las diferencias con el caso denominado “La Línea”, en el que se investigó una red de defraudación aduanera.
“El caso ‘La Línea’ golpea a la administración tributaria por dentro, porque hay personal involucrado. En temas de números de defraudación, este caso (B410) es mucho más grande, pero bastante más grande que el de ‘La Línea’ y está empezando”, dijo.
Agregó que el primero mencionado comenzó con una denuncia por Q25 millones, mientras que el develado recientemente arrancó con Q300 millones. Reiteró que la diferencia es que en este no hay personal involucrado de la SAT y compartió que se trata de una red que involucra a unas 410 empresas y que se continúa investigando.
El caso B410 fue dado a conocer el pasado miércoles por Díaz y otros funcionarios de la SAT en una rueda de prensa, donde se explicó que se detectó un entramado de empresas que no contaba con la capacidad para venderle 6 mil 400 millones de quetzales al Estado y también evadieron sumas millonarias en impuestos.
Hallazgos que permitieron detectar la estructura de defraudación
Díaz detalló que el entramado de empresas, con un mismo propietario y contador, le han vendido cientos de distintos productos a más de 20 entidades estatales, pese a que no cuentan con la “infraestructura” necesaria para llevar a cabo el trabajo contratado.
Al cuestionar al superintendente acerca de cómo se detectaron las anomalías, explicó que se trató de varios factores. Entre estos, que el contador les aseguró que desconocía ese vínculo con las entidades y denunció la situación.
También se dio seguimiento al sistema de facturación, donde se observaron datos inconsistentes. De igual forma, una dirección falsa como ubicación física de entidades que el sistema muestra que se está usando mucho y se debe investigar.
“Varios departamentos dan la voz de alerta y esto permite al Departamento de Investigaciones Especiales hacer el proceso de averiguación. Esto se dio hace más de nueve meses en el sistema de detección de anomalías”, compartió.
De acuerdo con Díaz, aproximadamente 70 personas del equipo de la SAT trabajaron en esta investigación, por lo que reconoció la labor que llevaron a cabo para que saliera a la luz toda esta trama ilícita.
Marco Livio Díaz, titular de @SATGT: “Todos los sistemas que tenemos en las áreas de Auditoria y Jurídico, varias personas los pueden ver. Y cuando vimos ante qué nos enfrentábamos, supimos que no se nos podía fugar la información y que necesitábamos trabajar esto… pic.twitter.com/0m6jNIf7wQ
— Emisoras Unidas (@EmisorasUnidas) August 16, 2024
Millonarias sumas cobradas en efectivo
Díaz no brindó información con respecto a los sindicados en el caso, pero sí recalcó que varios involucrados cobraron cheques en el sistema bancario en efectivo por cifras aproximadas de Q250 mil, para un total identificado hasta ahora de Q11.5 millones.
Con respecto a la ruta del dinero, el superintendente explicó que se desconocen detalles, pues ya no es competencia de la institución a su cargo, por lo que queda en manos de la Contraloría General de Cuentas.
En cuanto a las personas que podrían estar involucradas, detalló que por el momento no se han identificado funcionarios en la denuncia.
Finalmente, el titular de la SAT resaltó que al observar el esquema de tributación es evidente que se está ante un gran caso de defraudación tributaria, por lo que las investigaciones continúan por parte de esa entidad y las autoridades correspondientes.