El Arsenal, pese a la ausencia de un delantero centro y las dudas que tiene en la Premier League, estará por segundo año consecutivo en cuartos de final, salvo hecatombe histórica, tras golear al PSV Eindhoven por 1-7.
Los 'Gunners' sentenciaron el cruce con un resultado para espantar muchas de las incógnitas que existen sobre cómo sobrevivirá este equipo hasta final de temporada sin un '9' puro.
Mikel Arteta volvió a confiar en Mikel Merino como referencia en el área y, después de dos partidos a cero en Inglaterra, le funcionó. El español marcó un tanto y contribuyó a la contundente goleada, liderada principalmente por los canteranos Myles Lewis Skelly, que dio dos asistencias, y Ethan Nwaneri, que hizo una diana, y del capitán, Martin Odegaard, que se llevó un doblete.
Camino a la goleada
El primer gol, el que quitó la ansiedad al Arsenal de llevar más de 200 minutos sin marcar, lo hizo Jurrien Timber, al ganar en el salto en el segundo palo a Lang.
El defensa holandés aprovechó el centro a la media vuelta de Declan Rice y, viendo las celebraciones de los jugadores del Arsenal, las caras eran de alivio. Pese a que esta reacción pusiera de manifiesto los problemas de gol de un equipo que echa de menos a Gabriel Jesús y Kaiu Havertz, al Arsenal no le costó nada destripar a un terrible PSV en defensa.
Antes de la media hora, Nwaneri, remachando un pase atrás de Lewis-Skelly, y Merino, con una definición de delantero a un lío dentro del área, pusieron a los 'Gunners' camino de los cuartos con un claro 0-3.
Hasta que a Thomas Partey le dio por placar sin necesidad a De Jong a la salida de un córner y el PSVA recortó desde los once metros y por medio de Lang.
El 1-3 abría esperanzas para los tulipanes, al tiempo que Arteta protegió a Lewis-Skelly, al que el árbitro español Gil Manzano perdonó la tarjeta roja, mandándolo al banquillo.
Sentencia clasificación
Sin embargo, con los jugadores aún desperezándose tras el paso por vestuarios, llegaron dos picotazos más de los londinenses. En el 47, Martin Odegaard empujó un mal despeje de Walter Benítez y unos segundos después Trossard redondeó la manita al definir casi sin espacio ante la salida del arquero argentino.
La pesadilla de Benítez no acabó ahí y pudo hacer mucho más en el disparo desde fuera del área que supuso el 1-6 de Odegaard. Incluso Calafiori se unió a la fiesta como si fuera delantero, culminando un pase filtrado de Odegaard y salvando la salida de Benítez.
Con este resultado, la vuelta del miércoles que viene en el Emirates Stadium será apenas una anécdota, a no ser que al PSV le dé por firmar la remontada más histórica de la Liga de Campeones. Por lo visto en la ida, es imposible que eso ocurra.
*Información EFE.