El caso de Sean Diddy Combs ha estado en el ojo del huracán por las severas acusaciones de crimen organizado, tráfico sexual y transporte para prostitución que pesan sobre él.
La situación legal del rapero se le pone cuesta arriba luego de que uno de sus abogados, Anthony Ricco, solicitara formalmente ante el juez retirarse de la defensa legal de Sean Diddy Combs.
Ricco asegura que ya que no puede seguir representándole "bajo ninguna circunstancia", señaló durante la moción presentada ante el juzgado el pasado viernes.
"Aunque he proporcionado a Sean Combs el alto nivel de representación legal esperado por el tribunal, bajo ninguna circunstancia puedo continuar sirviendo efectivamente como abogado", declaró señalando que hay "suficientes razones" para exigir esa retirada.
El abogado fue contratado en septiembre del 2024 para ser parte del amplio equipo de defensa que representa a Combs.
Cabe destacar que la moción debe ser aprobada por el juez, por lo que ahora no se sabe por cuánto tiempo continuará; sin embargo, Marc Agnifilo y Teny Geragos siguen encabezando el grupo de abogacía del rapero.
Ricco dejó en claro que su salida no produciría retrasos en el juicio —previsto para el 5 de mayo— ni tampoco en la selección del jurado.
Detalles del caso
Sean Diddy Combs enfrenta tres acusaciones principales: asociación ilícita (racketeering), trata de personas con fines sexuales mediante el uso de la fuerza y transporte de personas para participar en prostitución.
Los documentos judiciales indican que, desde aproximadamente 2008, habría dirigido una red conocida como "The Combs Enterprise", compuesta por empresas como Bad Boy Entertainment, Combs Enterprises y Combs Global.
Según la acusación, esta red facilitaba actividades ilícitas de alcance interestatal e internacional, incluyendo la organización de eventos denominados "Freak Off parties", donde supuestamente se atraía a mujeres para forzarlas a participar en actos sexuales con trabajadoras sexuales.
La acusación describe un patrón de conducta violenta por parte del rapero, quien presuntamente agredía a sus víctimas mediante golpes, patadas y el uso de objetos contundentes.
Estas denuncias forman parte de una investigación más amplia que ha expuesto presuntas prácticas abusivas dentro de la industria del entretenimiento.
En paralelo al proceso penal, Sean Diddy Combs enfrenta más de 100 demandas civiles por presuntos abusos.
