En una noche repleta de flashes y atención mediática en Nueva York, Gwyneth Paltrow robó miradas al llegar acompañada por sus hijos, Moses y Apple Martin, al estreno de Marty Supreme.
La presencia de la familia en la alfombra roja no solo mostró su vínculo cercano sino que también marcó un momento de homenaje a la trayectoria de la actriz, reforzado por un gesto muy especial de su hija mayor.
Apple Martin generó gran expectativa al elegir el recordado vestido negro de Calvin Klein, el mismo diseño que Gwyneth Paltrow popularizó en 1996 durante la premiere de la película Emma.
El atuendo, reconocido por los expertos de la moda como un símbolo de estilo minimalista de los años noventa, volvió a escena casi treinta años después, ahora lucido sobre las nuevas generaciones.
Apple, de 21 años, emuló a la perfección el emblemático look de su madre, combinando el vestido con un elegante moño y pendientes de diamantes.
Un reencuentro con el pasado
La elección de Apple no pasó desapercibida para la prensa especializada que destacó la forma en que revivió un momento icónico del mundo del entretenimiento. Este guiño al pasado resaltó la influencia de Gwyneth Paltrow en el estilo de su hija y evidenció una tradición familiar que trasciende generaciones.
La propia Gwyneth Paltrow, de 53 años, también deslumbró en la gala al escoger un vestido negro con detalles en terciopelo y una gran lazada en el hombro.
El look sofisticado de la actriz complementó a la perfección el homenaje realizado por su hija, reflejando una sincronía visual entre ambas que fue tema de conversación entre los asistentes.
Los hijos de Gwyneth Paltrow y Chris Martin han comenzado a destacar en distintas áreas artísticas. Moses Martin, con tan solo 18 años, presentó recientemente su primer sencillo junto a su banda, dando inicio a su carrera musical en un entorno cada vez más competitivo.
Apple, por su parte, comenzó a consolidarse en la industria de la moda, participando en sesiones fotográficas y eventos exclusivos.



