En las últimas horas, más de cinco incendios han golpeado varias poblaciones al sur de California, especialmente las áreas cercanas a Los Ángeles, como Hollywood Hills, Altadena, Pacific Palisade y Malibú. Estas zonas se encuentran bajo una grave amenaza, debido a un fenómeno meteorológico conocido como los vientos de Santa Ana, que ha exacerbado las condiciones secas y cálidas, convirtiendo los incendios en uno de los peores registrados en la historia reciente de la ciudad.
Los vientos de Santa Ana, también conocidos como El Diablo, son un fenómeno que ocurre comúnmente en otoño, aunque en algunos casos puede extenderse hasta enero. Este fenómeno es característico de la región y se origina en los desiertos de Arizona. Los vientos son extremadamente secos y calientes, y su paso por las montañas de San Gabriel puede generar ráfagas que alcanzan hasta 50 kilómetros por hora, aunque en ocasiones logran intensificarse hasta alcanzar la fuerza de un huracán.
Las condiciones excepcionales, como un año particularmente seco y la escasez de agua en la región afectada, han sido citadas como factores que agravan la situación. Actualmente, los vientos de Santa Ana están alimentando los incendios que amenazan las densamente pobladas áreas cercanas a Los Ángeles.
En momentos en que feroces incendios, avivados por los fuertes Vientos de Santa Ana, convierten casas en cenizas y destruyen por completo zonas residenciales en el área de Los Ángeles, te contamos cómo y por qué ocurre este fenómeno meteorológico. 🌬🔥 ! #incendios #LosAngeles pic.twitter.com/yD1j2nEvsJ
— Poder Latino Network (@PoderLatino123) January 9, 2025
¿Qué son los vientos de Santa Ana?
El fenómeno se produce cuando hay una diferencia significativa de presión entre el este y la costa. Las masas de aire se desplazan de la alta presión hacia la baja presión, lo que provoca que los vientos soplen a alta velocidad. Según el investigador John Keely de la Universidad de California en Los Ángeles, los vientos se intensifican al descender por las montañas de San Gabriel, volviéndose aún más secos y calientes. A medida que avanzan, los vientos se caracterizan por una humedad relativa inferior al 5%, lo que aumenta la posibilidad de incendios.
"Los vientos de Santa Ana ocurren cuando hay gran presión en el este, en la Gran Cuenca, y un sistema de baja presión en la costa. Con el tiempo, estos vientos, al atravesar los cañones de la región, se difunden hacia áreas más alejadas", explicó Keely. Estos vientos pueden extenderse por vastas áreas y son conocidos por su capacidad para propagar incendios rápidamente.
El Viento de Santa Ana es un viento local catabático, que desciende la vertiente oeste de Sierra Nevada, ahora a 80-130 km/h, se reseca y calienta, siendo detonante y reforzador de los incendios en el área de Los Ángeles, California. pic.twitter.com/IlVulAxzKB
— Esteban Perdomo (@EstebanWXcast) January 8, 2025
Cambios en los vientos de Santa Ana en 2025
Tras analizar datos históricos de los vientos de Santa Ana durante los últimos 71 años, los científicos concluyen que el fenómeno ha sufrido pocos cambios, aunque su temporada ha variado. Si bien antes estos vientos eran más frecuentes en septiembre, actualmente se registran en diciembre y enero con mayor intensidad.
Keely resalta que uno de los factores más preocupantes es el aumento de la población en las zonas cercanas a las montañas de San Gabriel, lo que ha incrementado el riesgo de incendios. "El crecimiento poblacional ha llevado a una expansión de las líneas eléctricas, lo que aumenta la probabilidad de que estas sean dañadas por ramas caídas o caídas de postes, generando incendios devastadores", afirmó.
🚨I 🇺🇸 | El presidente Trump apuntó contra el gobernador demócrata Gavin Newscum por negarse a firmar la declaración de restauración hídrica que podría haber evitado el incendio apocalíptico que está azotando California: "Él es el culpable de esto". pic.twitter.com/EIGLakekt5
— 🔰Guardianes Patrióticos (@Patrioticos_RD) January 8, 2025
A medida que las condiciones climáticas extremas se intensifican, los materiales secos y la atmósfera sin humedad hacen que los incendios se propaguen rápidamente. Esto crea una situación de gran peligro, donde los vecindarios corren el riesgo de ser arrasados por las llamas.
Un futuro más riesgoso
La combinación de vientos fuertes, condiciones secas y un mayor desarrollo urbano hace que los incendios en el sur de California sean cada vez más destructivos. Los expertos advierten que la vulnerabilidad de las poblaciones cercanas a las montañas de San Gabriel podría seguir creciendo si no se toman medidas para reducir los riesgos, como el fortalecimiento de las infraestructuras eléctricas y la gestión de recursos naturales.
El fenómeno de los vientos de Santa Ana sigue siendo un desafío para las autoridades y residentes de la región, que deben enfrentarse a incendios cada vez más intensos y peligrosos.
