El proceso electoral en Ecuador se encamina hacia una segunda vuelta luego de que el escrutinio parcial de los comicios presidenciales del domingo reflejara un estrecho margen entre el actual presidente y candidato a la reelección, Daniel Noboa, y la aspirante del correísmo, Luisa González.
Con el 50,99 % de los votos contabilizados, Noboa, del movimiento oficialista Acción Democrática Nacional (ADN), obtiene el 45,21 % de los sufragios, mientras que González, representante de la Revolución Ciudadana, alcanza el 43,41 %, según datos del Consejo Nacional Electoral (CNE). Esta diferencia confirma la necesidad de una segunda vuelta, programada para el próximo 13 de abril, donde ambos candidatos volverán a enfrentarse, tal como ocurrió en los comicios extraordinarios de 2023.
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Durante el avance del conteo, la brecha entre ambos contendientes se redujo significativamente. Con el 9 % del escrutinio, la diferencia era de 6,33 %, pero con el 21,25 % escrutado, el margen disminuyó a 4,14 %. Incluso una encuesta a boca de urna había proyectado inicialmente una posible victoria de Noboa en primera vuelta con el 50,12 % de los votos, lo que finalmente no se concretó.
Por su parte, el expresidente Rafael Correa vaticinó que González podría superar a Noboa a medida que avance el escrutinio. La candidata correísta denunció presuntas irregularidades en el proceso y criticó al CNE por permitir que Noboa continuara ejerciendo la Presidencia durante la campaña, en lugar de delegar el cargo en su vicepresidenta, Verónica Abad.
Según la legislación ecuatoriana, un candidato necesita el 50 % más uno de los votos válidos o al menos el 40 % con una ventaja de diez puntos porcentuales sobre su más cercano competidor para ganar en primera vuelta. Al no cumplirse estas condiciones, Ecuador se prepara para un nuevo balotaje en abril, en el que los ciudadanos decidirán quién gobernará el país en el período 2025-2029.
