El Vaticano ha empezado a confirmar los primeras citas para organizar la sucesión del papa Francisco, fallecido este lunes 21 de abril, partiendo ya desde mañana con la primera congregación de cardenales que regirán el proceso.
El Vaticano ha entrado así en periodo de "sede vacante" y será administrado hasta encontrar un sucesor por el cardenal camarlengo, el estadounidense Kevin Joseph Farrell.
El proceso 'post-mortem' será acordado en las importantes congregaciones de cardenales, dirigidas por el purpurado decano, el italiano Giovanni Battista Re.
Mañana martes tendrá lugar la primera congregación general con los cardenales que ya se encuentren en Roma y su primera labor será estipular la liturgia fúnebre.
En los próximos días, los 135 cardenales elegibles para votar entrarán en la capilla Sixtina para elegir a su sucesor, con el 80 por ciento de los votos.
Ellos son algunos de los cardenales favoritos a dirigir la Iglesia Católica; sin embargo, se debe recordar que Jorge Mario Bergoglio fue considerado demasiado mayor para ser elegido papa en 2013, a sus 76 años, y que Karol Wojtyla no figuraba como favorito antes del cónclave de 1978 que lo eligió como papa Juan Pablo II.

Robert Sarah, originario de Guinea, de 79 años, simboliza una posible vuelta a posiciones más tradicionales de la Iglesia. Ha sido crítico con los avances impulsados por Francisco, como la apertura a los divorciados o la acogida de personas LGTBI. Goza de un amplio respeto dentro y fuera de África.

Pietro Parolín, actual secretario de Estado del Vaticano. Italiano de 70 años, con experiencia en relaciones internacionales, se perfila como un candidato de equilibrio.

Matteo Zuppi , Cardenal de Bolonia, de 69 años, representa la línea más continuista con el legado de Francisco. Progresista, comprometido con causas sociales; sin embargo, genera resistencias entre los sectores más conservadores del Colegio Cardenalicio.

Luis Antonio Tagle, originario de Filipinas de 67 años, es uno de los hombres de confianza del Papa Francisco y tiene una visión global de la Iglesia que muchos consideran necesaria.

Pierbattista Pizzaballa, Patriarca latino de Jerusalén, es una figura emergente. Ha ganado simpatía con su experiencia en diálogo interreligioso, aunque su reciente ascenso como cardenal juega en su contra frente a candidatos con más trayectoria.

Raymond Burke, cardenal estadounidense de 75 años, suena con fuerza entre los nombres de los «papables», en su caso como representante de la iglesia más conservadora, apoyó a Donald Trump en la campaña electoral de 2016 asegurando que este defendía «los valores de la Iglesia», en contraste con el papa Francisco, que se mostró crítico con Trump.

Péter Erdő, Cardenal conservador, húngaro de 70 años, rechaza la comunión a divorciados vueltos a casar y tiene posturas firmes en materia migratoria. Sería una elección que marcaría un giro hacia el ala tradicionalista.

Jean-Marc Aveline, Arzobispo de Marsella, es visto como el candidato favorito del papa Francisco. Nacido en Argelia y criado en Francia, tiene una sensibilidad especial hacia la migración y el diálogo interreligioso.
Cardenales latinoamericanos
Los cardenales latinoamericanos que entrarán en la Capilla Sixtina son los mexicanos Francisco Robles Ortega y Carlos Aguiar Reyes; el cubano Juan de la Caridad García Rodriguez, el guatemalteco Álvaro Ramazzini Imeri y el nicaragüense Francisco Brenes.
Los argentinos serán cuatro: el prefecto del Dicasterio de la Doctrina de la Fe, Víctor Manuel "Tucho" Fernández; el arzobispo de Córdoba, el jesuita Ángel Sixto Rossi; el arzobispo de Santiago del Estero, Vicente Bokalic y Mario Poli, arzobispo emérito de Buenos Aires,
Siete son los cardenales brasileños: João Braz de Aviz, Pedro Scherer, Orani João Tempesta, Leonardo Steiner . Sérgio da Rocha, Jaime Spengler y Paulo Zeza Costa.
Además de dos chilenos: Celestino Aos, aunque es español, y Fernando Natalio Chomali, mientras que también se incluyen en la lista el ecuatoriano Luis Fernando Cabrera, el paraguayo Adalberto Martínez Flores, el peruano y arzobispo de Lima, Carlos Castillo, y el uruguayo Daniel Fernando Sturla Berhouet.
Con información de agencia EFE