Al menos una persona murió y decenas más resultaron heridas la noche del martes, tras un violento choque de trenes cerca de la ciudad de Praga, en la República Checa.
El accidente habría ocurrido luego de que el tren de pasajeros no respetara un semáforo en rojo y terminara colisionando contra otro ferrocarril de mercancías.
En declaraciones a la televisión pública, el ministro de Transporte checo, Karel Havlicek, confirmó que el conductor del primer tren no respetó la señal, provocando el desastre.
“Ahora mismo se están investigando las causas. Aunque hay indicios que llevan a pensar que se debe a un error humano. Es muy probable que el maquinista se saltase un semáforo en rojo”; dijo, citado por por Czech Radio.
En primera instancia, la portavoz de los servicios de emergencia, Petra Effenbergerova, indicó que no hubo fatalidades, pero el ministro Havlicek confirmó posteriormente que sí hubo un fallecido.
“Desgraciadamente, hay un fallecido“, lamentó el funcionario, quien agregó que entre los heridos hay algunos cuyo estado es grave.
Por su parte, socorristas indicaron que la víctima fatal sería el propio conductor del tren de pasajeros, en el que viajaban unas 100 personas.
De acuerdo con los servicios de emergencia, se contabilizaban ocho heridos graves y 25 leves, y todos fueron hospitalizados, según la AFP.
Dos helicópteros fueron enviados al lugar del siniestro para transportar a las víctimas.
El accidente se produjo pasadas las 19:30 horas (locales), cerca de la ciudad de Cesky Brod, unos 30 kilómrytod al este de Praga.
Aumento de accidentes ferroviarios
Según autoridades checas, el accidente del martes es el cuarto incidente ferroviario ocurrido en las últimas dos semanas, algo que ha encendido las alarmas sociales y que lleva al gobierno a replantearse si las estrategias de seguridad se están aplicando de forma adecuada.
El ministro Havlicek convocó para este miércoles a un grupo de especialistas para examinar las inversiones que se están haciendo en materia de seguridad ferroviaria.