La tenista, Serena Williams, que buscaba hacer historia, acabó abandonando el martes en la primera ronda de Wimbledon, donde Roger Federer sobrevivió a un buen susto gracias a la lesión de su oponente y la española Carla Suárez, recientemente recuperada de un cáncer, se despidió emocionada.
“He tenido que abandonar con el corazón roto hoy (martes) después de lesionarme en la pierna derecha”, indicó la tenista de 39 años, en su primera reacción en las redes sociales.
“Mi amor y mi gratitud van para los fans y para el equipo que hacen que estar en la Central Court sea tan especial. Sentir el calor y el apoyo extraordinario del público hoy cuando entré en la pista y cuando salí me han emocionado”, añadió.
Serena Williams, que cumplirá 40 años en septiembre, abandonó la cancha llorando y no acudió a la tradicional conferencia de prensa con los periodistas.
Serena Williams resbala
En el último partido en una pista central cubierta debido a la lluvia, Williams, siete veces campeona de Wimbledon, se enfrentaba a bielorrusa Aliaksandra Sasnovich.
We're heartbroken for you, Serena.
Our seven-time singles champion is forced to retire from The Championships 2021 through injury#Wimbledon pic.twitter.com/vpcW1UN78s
— Wimbledon (@Wimbledon) June 29, 2021
Era el primer paso en su intención de levantar de nuevo el trofeo e igual el récord de 24 Grand Slams individuales de la legendaria tenista australiana Margaret Court, agrandando su leyenda.
Pero la estadounidense de 39 años, que nunca hasta ahora había perdido en primera ronda en Londres, resbaló cuando iba ganando 3-1 en el primer set y tuvo que ser examinada del tobillo izquierdo.
Poise and grace in the most trying of circumstances.#Wimbledon pic.twitter.com/6O6dvpReXi
— Wimbledon (@Wimbledon) June 29, 2021
Regresó tras recibir atención médica, pero acabó tirando la toalla con 3-3 y se marchó cojeando y entre lágrimas.
Federer avanza
Por su parte, Federer solo respiró tranquilo cuando su oponente, el francés Adrian Mannarino, abandonó también por lesión con 6-4, 6-7 (3/7), 3-6 y 4-1 en el marcador.
El suizo, octava raqueta del mundo a sus casi 40 años, afirmó no querer imponerse así y deseó “una rápida recuperación” al francés, del que dijo que “podría haber ganado el partido porque jugó mejor”.
A Federer le costó quebrarle el servicio en el primer set, algo que solo logró al final desplegando un espectacular arsenal de golpes.
Pero siguió sin encontrar soluciones contra la agresividad de Mannarino en la segunda manga, perdió estrepitosamente el tie break y concedió rápidamente el tercer set.
El suizo parece que le está costando alcanzar su mejor nivel tras haberse sometido a dos operaciones en la rodilla derecha en 2020 y no había encontrado su habitual genialidad hasta la cuarta manga cuando su oponente cayó al suelo lesionado.
*Información: AFP / Getty Images