Rebel Wilson se propuso hacer un cambio radical en su físico antes de cumplir 40 años y la pandemia fue el pretexto perfecto para poner manos a la obra.
La actriz ha perdido poco más de 60 libras desde que inició el 2020 y quiere ser un modelo a seguir para sus fans.
Luciendo un traje de baño con rojo y con un llamativo escote, ella presumió su nueva figura pero también compartió un poderoso mensaje:
“Nunca es demasiado tarde para mejorarse a sí mismo, para mejorar su salud, su corazón, su felicidad, su armonía”.
“Para todos los que están tratando de ser un poco mejores esta semana: ¡adelante! Cada parte cuenta. Cada esfuerzo vale la pena. Tú lo vales”, exclamó desde un exclusivo resort en la Polinesia Francesa.
Cuando comenzó el 2020, prometió que utilizaría ese año para enfocarse en su salud. Ahora presumió su evolución física en redes sociales y el cambio fue aplaudido por sus seguidores.
Era muy común verla haciendo todo tipo de ejercicio como pesas, caminatas o lo que fuera sugerido por su entrenador físico. Por supuesto que cambió por completo su dieta.
Cada pasó contó para la actriz
Según confesó en una entrevista, Rebel Wilson se había fijado la meta de bajar un peso considerable por salud.
Pero poco a poco fue viendo los cambios considerables, lo que la llevó a reflexionar sobre lo lejos que ha llegado.
En agosto, compartió una foto que encontró de aquella época “más insalubre”, justo de los meses posteriores a la muerte de su padre, cuando ella recurría a la comida para ‘adormecer sus emociones’.
“Mi padre había fallecido de un infarto y fue un momento muy triste. No pensaba muy bien de mí misma y no me valoraba como debería haberlo hecho”, reveló en el post acompañado de una imagen de ella y el tenista Novak Djokovic.
Ella acudió a un centro orientado a la salud en Austria, en donde aprendió a reducir su ingesta de carbohidratos y aumentar su consumo de proteína mientras mantiene un equilibrio general que le permite comer de vez en cuando un antojo no tan saludable.