Kylian Mbappé, delantero estrella del Real Madrid, encendió las alarmas en el conjunto merengue tras confirmarse este viernes que sufre un esguince en el tobillo derecho. Las pruebas médicas realizadas en Valdebebas confirmaron las sospechas iniciales del cuerpo médico del club, lo que pone en duda su participación en la final de la Copa del Rey frente al FC Barcelona, programada para el sábado 26 de abril. Aunque existe optimismo dentro del club sobre su posible recuperación a tiempo, la evolución del futbolista en los próximos días será determinante para definir su disponibilidad.
El percance se produjo el pasado miércoles durante el encuentro de vuelta de los cuartos de final de la Liga de Campeones ante el Arsenal. Con el marcador global prácticamente sentenciado (1-4 en ese momento), Mbappé abandonó el terreno de juego en el minuto 75 tras una disputa con Declan Rice. En esa acción, su tobillo derecho se dobló de forma visible, obligándolo a dirigirse directamente al vestuario sin poder apoyar el pie con normalidad. El partido terminó 1-1, confirmando la eliminación del conjunto blanco con un global de 1-5.
Mbappé baja confirmada para este fin de semana, por suspensión
Debido a esta lesión, y también por una sanción acumulada tras su expulsión ante el Alavés, el francés no estará disponible para el duelo de este domingo en LaLiga contra el Athletic Club. Asimismo, su presencia en el encuentro del próximo miércoles ante el Getafe, también correspondiente al campeonato doméstico, está prácticamente descartada. El Real Madrid, que aún pelea por el título liguero, no quiere arriesgar a su máxima figura en compromisos previos a la final copera.
La prioridad ahora es clara: contar con Mbappé en plenitud de condiciones para el duelo decisivo ante el Barcelona. Con la Champions fuera del alcance y una Liga que se complica jornada a jornada, la final de Copa representa una oportunidad crucial para cerrar la temporada con un título importante. La presencia o ausencia del delantero francés podría ser un factor clave en el desenlace del clásico, que podría definir no solo la campaña blanca, sino también el futuro inmediato del proyecto liderado por Carlo Ancelotti.

