El mundo del fútbol se encuentra consternado tras conocerse que el delantero nigeriano del Nottingham Forest, Taiwo Awoniyi, fue ingresado en coma inducido luego de sufrir una grave lesión abdominal. El incidente ocurrió el pasado domingo durante el encuentro frente al Leicester City, cuando Awoniyi se estrelló violentamente contra uno de los postes al intentar marcar un gol. La jugada, que debió haber sido anulada por fuera de juego, continuó hasta su conclusión debido al protocolo del VAR, lo que impidió una intervención inmediata.
A pesar del fuerte impacto, el atacante fue atendido brevemente en el terreno de juego y terminó disputando los minutos finales del partido. No obstante, el lunes, tras una evaluación médica más detallada, el cuerpo médico del club determinó que era necesario trasladarlo de urgencia al hospital, donde fue sometido a una operación de emergencia y posteriormente colocado en coma inducido para facilitar su recuperación. El Nottingham Forest emitió un comunicado confirmando que Awoniyi se está recuperando favorablemente, pero advirtió sobre la gravedad de la situación, subrayando la importancia de priorizar siempre la salud de los futbolistas.
El Nottingham Forest actualizará la situación del jugador
La polémica no tardó en surgir cuando se conoció que el Forest no realizó cambios para sustituir al jugador lesionado, alegando una falla en la comunicación. Esta situación habría desencadenado la airada reacción del propietario del club, Evangelos Marinakis, quien irrumpió en el campo de juego para confrontar al entrenador Nuno Espírito Santo. El club defendió la actitud del dueño griego, calificándola como una muestra de liderazgo y preocupación genuina por el bienestar de sus jugadores.
En un principio, se pensó que la presencia de Marinakis en el césped obedecía a la frustración por el empate ante un Leicester ya descendido, resultado que dejó al Forest en séptima posición de la tabla, a un solo punto del quinto puesto que otorga acceso a la Liga de Campeones. Sin embargo, los hechos posteriores dejaron claro que su reacción fue provocada por el estado de salud de Awoniyi. La situación ha generado un amplio debate sobre la gestión de las lesiones en el fútbol profesional y la necesidad de protocolos más efectivos para proteger la integridad de los jugadores.