El Estadio Santiago Bernabéu vivió un emotivo momento este sábado antes del inicio del encuentro entre Real Madrid y Espanyol. El protagonista fue Abderrahim Ouhida, un joven marroquí de 16 años que sufrió una tragedia en septiembre de 2023, cuando el terremoto que azotó Marruecos se cobró la vida de sus padres, su abuelo y dos de sus hermanos. En memoria de su historia y como muestra de solidaridad, el club blanco le invitó a realizar el saque de honor.
El recuerdo de Ouhida se hizo conocido en su país cuando, tras la catástrofe, apareció en televisión llorando desconsoladamente y vistiendo una camiseta del Real Madrid. Ese gesto no pasó desapercibido para el club merengue, que quiso brindarle una experiencia inolvidable en uno de los escenarios más icónicos del fútbol mundial. El homenaje reflejó el lado más humano del deporte, en el que la pasión por un equipo se convierte también en refugio en medio del dolor.
La conmovedora historia del joven marroquí Abderrahim Ouhida
Con una camiseta blanca personalizada con su nombre y el número 10 a la espalda, Abderrahim fue recibido con una ovación cerrada por parte de la afición y de los propios futbolistas, quienes le hicieron un pasillo de honor hasta el círculo central. El joven, visiblemente emocionado, realizó el saque inicial del partido y se ganó el aplauso de todo el estadio, que se volcó con su historia y su fortaleza.
Tras el simbólico acto, Ouhida compartió abrazos con varias estrellas del Real Madrid, entre ellas Kylian Mbappé, Vinícius Júnior y el juvenil Franco Mastantuono, antes de dirigirse a la grada para presenciar el partido. El homenaje en el Bernabéu no solo representó un reconocimiento a su sufrimiento, sino también un recordatorio de cómo el fútbol puede convertirse en un puente de solidaridad y esperanza en medio de las tragedias.
