Las selecciones de Guatemala y Panamá protagonizarán este jueves un duelo decisivo en las eliminatorias de la Concacaf rumbo al Mundial de 2026, que se celebrará en Estados Unidos, México y Canadá. El partido, que se disputará en el estadio Manuel Felipe Carrera, al sur de la Ciudad de Guatemala, representa una auténtica final para ambos equipos, pues una derrota podría significar el adiós definitivo al sueño de clasificar a la próxima Copa del Mundo.
El antecedente más reciente entre ambas selecciones se remonta al 8 de septiembre pasado, cuando Guatemala logró rescatar un empate 1-1 ante los canaleros en el estadio Rommel Fernández de la capital panameña. Aquel resultado dejó abierta la rivalidad y aumentó las expectativas de cara al compromiso en suelo guatemalteco. Sin embargo, ahora el panorama es distinto: la presión recae sobre los dirigidos por Luis Fernando Tena, quienes no solo deberán enfrentarse a un rival de jerarquía, sino también a la exigencia de un público que sueña con ver a su selección en un Mundial por primera vez en la historia.
Guatemala tiene una cita con la historia
La selección guatemalteca llega al compromiso ubicada en el tercer lugar del Grupo A de la tercera ronda de las eliminatorias de la Concacaf, con 5 puntos. Por encima se encuentran Surinam y Panamá, ambos con 6 unidades, mientras que El Salvador cierra el grupo con 3 puntos. Con solo dos jornadas por disputar, la importancia del enfrentamiento es máxima, ya que únicamente el líder del grupo obtendrá el boleto directo al Mundial de 2026.
El conjunto panameño, dirigido por el hispano-danés Thomas Christiansen, buscará imponer su experiencia internacional y mantener la regularidad que lo ha caracterizado en los últimos torneos. No obstante, los canaleros son conscientes de que El Trébol será una auténtica fortaleza, con miles de aficionados guatemaltecos alentando sin cesar. Por su parte, Tena confía en el trabajo táctico y la motivación de sus jugadores, quienes han mostrado progreso y compromiso en el proceso clasificatorio.
El estadio Manuel Felipe Carrera promete ser una caldera este jueves, cuando la afición guatemalteca colme las gradas con la esperanza de dar un paso histórico. El sueño de Guatemala está a solo 180 minutos de distancia, pues cerrará la eliminatoria el 18 de noviembre en casa frente a Surinam. Una victoria ante Panamá no solo acercaría a la Azul y Blanco al anhelado Mundial, sino que también encendería la ilusión de todo un país que ansía hacer historia en el fútbol internacional.



