Sin perder la tradición, los fieles católicos celebran este Domingo de Ramos para dar inicio a la Semana Santa.
Conmemoran así la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén, cuando la multitud lo recibió con hojas de palmas.
Este Domingo de Ramos comenzó dando lugar a las actividades de una Semana Santa distinta, en medio de la crisis sanitaria por el coronavirus.
Eucaristía en Domingo de Ramos
Esta mañana, a puerta cerrada, se llevó a cabo la Santa Eucaristía en la Iglesia San Miguel de Capuchinas.
La tradicional procesión de Jesús de Nazareno de las Palmas, más conocida como La Burriquita, en la que los fieles portan ramos de olivo fue cancelada para cumplir con las normas de prevención por la pandemia.
Por segundo año, las condiciones forzaron a un ambiente inusual, pero hay espacio para la veneración y los devotos tienen acceso a la Iglesia.
“A pesar de que no están nuestras procesiones, estamos compartiendo. Felices porque podemos tener acercamiento con nuestras imágenes y pedirle a Dios que nos cuide y siga bendiciendo nuestro país”, expresó una de las devotas.
“A pesar de todo tenemos muchas cosas buenas, sobre todo su gente, la gente del pueblo”, añadió.
La Rectoría de San Miguel hizo una transmisión en vivo, siendo las redes sociales una opción para acercar a los devotos a seguir las actividades.
Acompañan a Jesús de las Palmas
“Me siento tranquila y feliz porque a pesar de lo que estamos viviendo, hemos tenido la bendición de tener distintas formas de vivir nuestra Cuaresma y Semana Santa. Nuestra fe va a continuar”, aseguró otra devota.
Pese a no ser el ambiente tradicional, los ramos no hicieron falta y los devotos los llevaron en sus manos para ser bendecidos. También fueron colocados en las puertas y ventanas de sus casas.
La eucaristía de este día tiene así sus momentos importantes. Por un lado, el camino de los olivos y las palmas y, por otro, la lectura del relato que evoca la Pasión del Señor, recogida en el evangelio de San Mateo.