El presidente estadounidense, Donald Trump, dijo este viernes que eligió a un funcionario ministerial para suceder a Kevin McAleenan como secretario interino de Seguridad Interior, un cargo clave en la lucha contra la inmigración ilegal.
Consultado sobre los rumores de que Chad Wolf reemplazará a McAleenan, Trump respondió: “Él está como suplente ahora y veremos qué sucede”.
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Un portavoz de la Casa Blanca brindó precisiones.
“Como dijo el presidente, Kevin McAleenan hizo un gran trabajo. Se irá después del Día de los Veteranos, y tras su partida, Chad Wolf será secretario interino”, dijo Hogan Gidley.
Al frente del DHS
McAleenan asumió el cargo en abril, sucediendo a Kirstjen Nielsen.
Wolf fue, entre otras cosas, director de gabinete de Nielsen. También ha sido cabildero, según medios estadounidenses.
Recientemente, ejerció como jefe de gabinete de Kirstjen Nielsen, secretaria de Seguridad Nacional de EE.UU. entre diciembre de 2017 y abril de 2010 y a quien Trump despidió descontento con los escasos resultados que su estrategia en la frontera estaba teniendo para frenar la inmigración.
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Nielsen fue sustituida por McAlleenan, que antes de asumir este cargo había ejercido como jefe de la Patrulla Fronteriza.
Antes que Nielsen, ejercieron como secretarios de Seguridad Nacional el general retirado John F. Kelly, que luego pasó a ser jefe de gabinete de la Casa Blanca, y la funcionaria Elaine Duke.
Bajo la dirección de McAlleenan, Estados Unidos ha firmado acuerdos migratorios con México, Guatemala, El Salvador y Honduras que, en la práctica, han limitado el derecho al asilo para los centroamericanos, la que ha sido una de las obsesiones de Trump desde su llegada a la Casa Blanca.
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Estatus migratorio
Wolf asumirá el cargo en un momento en el que la llegada de migrantes y refugiados centroamericanos se ha reducido en términos intermensuales, pero sigue marcando cifras récord con respecto a otros años.
Al anunciar la partida de McAleenan el 11 de octubre, Trump aseguró que éste quería “pasar más tiempo con su familia e ir al sector privado”.
Pero McAleenan le había dicho antes al Washington Post que no se sentía capaz de controlar su ministerio.
“Lo que no controlo es el tono, el mensaje, las relaciones con el exterior y el enfoque del ministerio, en un período cada vez más polarizado”, “una posición incómoda” para un responsable de su nivel, había dicho al diario.
Trump está haciendo todo lo posible para poner la inmigración ilegal, que considera una de las amenazas más graves para el país, en el centro de los debates de la campaña presidencial de 2020.
