El cuerpo de un niño de 12 años que murió tras consumir una sopa instantánea lleva tres días en la morgue del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), informó esa entidad.
De acuerdo con el Inacif, el cadáver del pequeño no ha sido reclamado por la familia, debido a que no fue inscrito ante el Registro Nacional de las Personas (Renap) y no cuenta con certificado de nacimiento.
Sin ese documento el Inacif no puede emitir el acta de defunción ni se permite inscribir el fallecimiento ante el Renap, por lo cual el cuerpo no ha sido entregado a familiares.
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El niño se llamaba Carlos Benjamín Orellana, de acuerdo con la información que ofrecieron sus familiares.
La muerte del niño
La historia del deceso del menor señala que el pasado lunes 9 de diciembre habría comido una sopa instantánea, la cual pudo estar vencida y le habría provocado la muerte.
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Sin embargo la necropsia reveló que la causa de la muerte del menor es enterocolitis, una enfermedad intestinal “más frecuente y más grave entre los bebés prematuros” y ocurre por lesiones o la inflamación del intestino delgado o grueso, según el sitio electrónico Kids Health.
“Esto puede conducir a la muerte del tejido intestinal y, en algunos casos, a una perforación de la pared intestinal. El intestino puede dejar de retener el material de desecho. Por lo tanto, las bacterias pueden pasar al torrente sanguíneo y causar una infección de riesgo vital”.
