Kylian Mbappé ha cerrado una temporada de ensueño y se acuesta como líder tanto del Pichichi como de la Bota de Oro. El delantero francés ha marcado 31 goles en liga, una cifra que le permite encabezar con claridad la tabla de máximos goleadores en España, sacando seis tantos de ventaja a su inmediato perseguidor, Robert Lewandowski. Aunque el polaco aún debe disputar un último partido ante el Athletic Club en San Mamés, las posibilidades de que le arrebate el galardón son casi inexistentes: necesitaría marcar siete goles, algo que parece más una fantasía que una opción real.
En la carrera por la Bota de Oro, el panorama está un poco más abierto, aunque Mbappé ha hecho lo necesario para terminar en lo más alto. Con su último gol, alcanzó los 43 tantos esta temporada, 31 de ellos en liga, lo que le otorga 62 puntos en el sistema de puntuación del prestigioso galardón europeo. La fórmula es clara: los goles se multiplican por un coeficiente, que depende del nivel de la liga en la que se hayan marcado. Las cinco grandes ligas (España, Inglaterra, Francia, Alemania e Italia) tienen un coeficiente de 2, mientras que otras ligas como la portuguesa, donde brilla Viktor Gyökeres, tienen un valor de 1.5. A pesar de que el sueco ha anotado 39 goles, su puntuación se queda corta por el coeficiente.
Mbappé, de menos a más en la presente temporada
Mbappé, además, tiene la posibilidad de superar su récord personal de 44 goles en una sola temporada, conseguido en la 2023-24. Le resta el Mundial de Clubes, y con solo un tanto más igualará esa marca. Este año ha batido registros importantes: superó los 33 goles de Cristiano Ronaldo en su primera temporada con el Real Madrid y ha dejado atrás los 37 de Zamorano en la campaña 1992-93, convirtiéndose en el mejor debutante de la historia del club. Un dato curioso: ninguno de sus 43 goles ha sido de cabeza, una rareza para un goleador de su talla.
Ahora, todo está en manos de otros. Mohamed Salah podría arrebatarle la Bota de Oro si mañana consigue anotar cuatro goles frente al Crystal Palace. Difícil, pero no imposible para el egipcio. Mientras tanto, Mbappé solo puede esperar. Su trabajo ya está hecho. Como la tortuga del cuento, ha mantenido el paso firme, constante y eficaz. Y salvo un milagro, terminará la temporada como el rey del gol en Europa y en España.

