El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, vuelve a estar en el centro de la conversación pública tras revelarse que desea que el nuevo estadio de los Washington Commanders lleve su nombre. De acuerdo con un informe difundido este sábado por ESPN, el mandatario habría expresado su interés en que el recinto, cuya inauguración está prevista para 2030, sea bautizado en su honor. El proyecto, valorado en 3.700 millones de dólares, se construye sobre el histórico Robert F. Kennedy Memorial Stadium, antiguo hogar de la franquicia entre 1961 y 1996.
Según fuentes consultadas por la cadena deportiva, Trump estuvo directamente involucrado en las negociaciones para hacer posible el nuevo estadio, ya que los terrenos donde se edificará pertenecen al gobierno federal. Karoline Leavitt, portavoz de la Casa Blanca, afirmó a ESPN que "sería un nombre hermoso, ya que fue el presidente Trump quien hizo posible la reconstrucción del nuevo estadio". Asimismo, un alto funcionario del gobierno señaló que "es lo que quiere el presidente, y probablemente sucederá".
La decisión no depende de Donald Trump
No obstante, la decisión final no depende únicamente de la Casa Blanca. Como ocurre con la mayoría de estadios en Estados Unidos, el nombre del recinto estará sujeto a acuerdos de patrocinio con empresas privadas, aunque existe la posibilidad de que una denominación comercial conviva con un homenaje a una figura pública. En este caso, también participan en la discusión los Washington Commanders, el Distrito de Columbia —que aporta 1.000 millones de dólares al proyecto— y el Servicio de Parques Nacionales, propietario de los terrenos. Este último estará bajo una nueva administración para 2030, una vez que concluya el actual mandato presidencial.
Mientras tanto, se prevé que Trump asista este domingo al partido entre los Commanders y los Detroit Lions, invitado personalmente por el dueño de la franquicia, Josh Harris. De acuerdo con ESPN, este encuentro podría servir como escenario para avanzar en las conversaciones sobre el nombre del nuevo estadio, un asunto que promete seguir generando debate tanto en el ámbito deportivo como en el político.

