Este sábado se vivió una jornada histórica en el fútbol argentino con el tan esperado regreso de Ángel Di María a Rosario Central. Tras más de una década en la élite del fútbol europeo, donde brilló en equipos como el Real Madrid, PSG, Juventus y Benfica, el hijo pródigo del 'Canalla' volvió a casa y lo hizo como soñaba cualquier aficionado: marcando un gol y dejando su sello en el empate 1-1 ante Godoy Cruz, por la Liga Profesional.
La previa del encuentro estuvo cargada de emotividad. Durante su presentación en el Estadio Gigante de Arroyito, Di María no pudo contener las lágrimas, visiblemente conmovido por el reencuentro con la afición que lo vio nacer futbolísticamente. En un ambiente de fiesta y nostalgia, el número 11 recibió una ovación ensordecedora que ratificó el amor incondicional del pueblo rosarino hacia su ídolo.
Di María anotó, pero no pudo llevarse la victoria
El gol de Di María llegó al minuto 78 desde el punto penal, luego de una falta polémica que generó opiniones divididas. Sin embargo, el 'Fideo' no titubeó y transformó el cobro en el 1-0 parcial, desatando la euforia de los hinchas. Fue su primer tanto en el fútbol argentino desde su salida en 2007, y un momento que quedará grabado en la memoria colectiva del club y sus seguidores.
Lamentablemente para Rosario Central, la historia no terminó con final feliz. Cuando todo parecía encaminado hacia una victoria soñada, Godoy Cruz logró empatar el partido en el minuto 90+5 gracias a Vicente Poggi, quien silenció el estadio con un remate certero. A pesar del amargo cierre, la noche fue una celebración para el club y para Di María, que demostró que el amor por la camiseta se mantiene intacto, más allá del tiempo y los kilómetros.

